Dios está allá. Dios estuvo ahí. Y también está aquí.
Si te dijera que hay una versión de ti, dentro de 10 años, que daría lo que fuera por volver aquí… a este preciso momento… ¿me creerías?🤔 Ese día que hoy te parece “normal”, esa temporada en la que solo estás esperando que pase algo, ese momento que te tiene frustrad@ o agotad@… ese instante tiene más de Dios de lo que imaginas. Porque sí… Dios también está en las pequeñas cosas. En ese mensaje que llegó justo cuando más lo necesitabas. En una sonrisa que te hizo respirar hondo. En el abrazo que te recordó que no estás sol@. En los cinco minutos de paz que parecen poco, pero son tesoro. Porque incluso en el simple acto de respirar, estamos diciendo Su nombre en hebreo, YHWH — el que es, el que era, el que será. Cada aliento es una declaración de Su presencia en nuestra vida. Hasta en la nieve, que cae suavemente del cielo, Dios se manifiesta. La nieve tiene una perfección única, cada copo es un reflejo de Su diseño, y como dice la Biblia en Job 38:22-23: "¿Has entrado tú en los t...