Dios está allá. Dios estuvo ahí. Y también está aquí.
Si te dijera que hay una versión de ti, dentro de 10 años, que daría lo que fuera por volver aquí… a este preciso momento…
¿me creerías?🤔
Ese día que hoy te parece “normal”,
esa temporada en la que solo estás esperando que pase algo,
ese momento que te tiene frustrad@ o agotad@…
ese instante tiene más de Dios de lo que imaginas.
Porque sí…
Dios también está en las pequeñas cosas.
En ese mensaje que llegó justo cuando más lo necesitabas.
En una sonrisa que te hizo respirar hondo.
En el abrazo que te recordó que no estás sol@.
En los cinco minutos de paz que parecen poco, pero son tesoro.
Porque incluso en el simple acto de respirar, estamos diciendo Su nombre en hebreo,
YHWH — el que es, el que era, el que será.
Cada aliento es una declaración de Su presencia en nuestra vida.
Hasta en la nieve, que cae suavemente del cielo, Dios se manifiesta.
La nieve tiene una perfección única, cada copo es un reflejo de Su diseño,
y como dice la Biblia en Job 38:22-23:
"¿Has entrado tú en los tesoros de la nieve,
o has visto los tesoros del granizo,
los cuales tengo guardados para el tiempo de angustia,
para el día de la batalla y la guerra?" (Job 38:22-23)
Él usa todo para Su gloria, incluso lo que parece insignificante a simple vista.
Dios ya estuvo allí, en tu pasado,
en cada momento que pensaste que te habías perdido.
Estuvo en las decisiones difíciles, en los días de dolor,
y aunque no lo entendías, te sostenía.
Él fue tu refugio en cada tormenta que pensaste que no podrías soportar.
Dios está aquí, en tu presente,
en el aliento que tomas ahora, en cada paso que das,
te guía con amor y paciencia.
No importa lo que enfrentes hoy, Él nunca te ha dejado.
Te recuerda que aún en el caos, Él está obrando en ti.
Y Dios estará allá, en tu futuro,
en ese porvenir que aún no has visto.
Él ya ha preparado el camino, y no importa cuán incierto se vea,
Él estará contigo, en cada desafío, en cada victoria.
Tu futuro está en Sus manos.
Él ya preparó caminos donde ahora solo ves obstáculos.
Y no te pide que resuelvas todo, ni que lo tengas claro. Solo te pide que vivas este día con Él.
No se preocupen por el mañana, porque el día de mañana traerá sus propias preocupaciones. Cada día tiene ya sus propios problemas.”
— Mateo 6:34
Jesús nos llama a vivir un día a la vez, con confianza, no porque ignoremos el futuro, sino porque confiamos en que Dios ya está allí. El Espíritu Santo no nos empuja a correr, sino a depender.
Tranquil@, que no tienes que tener todo resuelto hoy.
Dios está contigo en el aquí y el ahora, y no importa lo que pase mañana, Él ya tiene el control.
Recuerda que estás viviendo el sueño de alguien. Lo que para ti parece un caos, para otros podría ser una bendición que aún no tienen.
Así que respira, disfruta el presente, porque cada día es un regalo, y Él está guiando cada paso. Confía en que tu historia es única y está llena de propósito. 🌟
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